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Mi Hermana, La Princesa (My Sister, The Princess) – Missax
Video Porno Subtitulado al Español de My Sister, The Princess -Athena Fleurs – Missax
Athena (Fleurs) y su hermanastro Robby (Echo) se dedican a reñir entre sí, introducidos en una desagradable discusión en la cocina una mañana. Viviendo incómodamente juntos bajo el mismo techo tras el matrimonio de la madre de ella con el padre de él, parecen detestarse mutuamente, hasta que la conversación gira en torno al sexo.
Cuando le pillan mirando el cuerpo de la rubia y le critican por ello, Robby estalla: “¡Eres un narcisista! Eres exactamente del tipo que piensa que todos los hombres quieren follársela”. “La mayoría de los hombres lo hacen”, responde Athena tranquilamente. “Ya. ¿Qué te parece que mi padre, mi irremediablemente enamorado padre de tu madre, quiera follarte?”, pregunta. Athena asiente con la cabeza. “Vale, y yo, ¿crees que quiero follarte?”, añade Robby. Ella se acerca mucho a él y le dice: “¿Tú no?”, a lo que Robby estalla en carcajadas. “No puedo creer que vaya a llegar tarde porque he estado discutiendo con un idiota”, dice ella, condescendiente, y se va, haciéndole un gesto con el dedo e insultándole una vez más antes de marcharse.
Más tarde, Robby la encuentra llorando en su cama, pero sigue resentido por su comportamiento principesco. Las lágrimas de ella lo agotan rápidamente y se disculpa. “¿Va todo bien?”, le pregunta. “No, odio mi trabajo, no tengo amigos”, dice ella lloriqueando. Tira de su fibra sensible. Robby es un buen tipo y odia ver llorar a su hermana. Es molesta, pero él la quiere.
Se sienta a su lado en la cama e intenta infundirle confianza, pero ella le dice: “No necesito tu compasión”. Ambos hacen confesiones: ella admite tener una obsesión por el sexo, mientras que Robby admite que, después de sentirse intimidado al principio por su belleza cuando se mudó, más tarde se ha enamorado de ella. Cuando el tema se convierte en hermanos que tienen sexo juntos, el ambiente se caldea y Robby concede: “¿Quizá un beso estaría bien?”.
“Un beso platónico, sin follar”, susurra ella. El beso rompe el hielo con creces y pronto intercambian insultos amistosos, nacidos del calor sexual más que de la ira. “Muéstrame cuánto me deseas”, murmura ella. Cubriéndola de besos, Robby se le echa encima, apartándole las bragas para empezar a lamerle el coño. Le quita el sujetador, dejando al descubierto sus hermosos pechos naturales. Después de una sensual mamada, ella le pregunta: “Quiero que seas el primero. Por favor, hazlo despacio”. Mira cómo esta escena tabú se convierte poco a poco en sexo apasionado…